Brasil prohíbe la caza de ballenas en sus aguas.
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Univisión.com, 20 Diciembre 2008.
Brasil: gobierno decreta santuario de ballenas y delfines contra cazadores.
RIO DE JANEIRO. El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, firmó esta semana un decreto que considera las aguas jurisdiccionales de la costa de su país un santuario de ballenas y delfines y refuerza la prohibición de su caza, permitiendo apenas estudios o avistamiento turístico.
Según el decreto presidencial publicado en el Diario Oficial brasileño y que hacía tiempo era reclamado por grupos ecologistas, "sólo están permitidos la investigación científica y el aprovechamiento turístico ordenado".
Solamente se podrán realizar pesquisas científicas no letales con esos animales y a nivel turístico se permitirán visitas de áreas visibles sobre la costa, como el caso del Archipiélago de Abrolhos, en el estado de Bahia.
El decreto refuerza la prohibición decidida hace 21 años con una ley que prohibe la caza de ballenas y delfines en aguas brasileñas. Además, el gobierno deberá defender la preservación de esos mamíferos a nivel internacional en foros y actividades diplomáticas de carácter ambiental.
De acuerdo con lo expresado por el ministro de Medio Ambiente, Carlos Minc, en una entrevista con la estatal Agencia Brasil, "la creación de un santuario es un aviso para los depredadores", principalmente ante la presión internacional de países como Japón para que se autorice la caza.
Entre otras misiones, Minc dijo que Brasil podrá buscar mecanismos de cooperación en materia de políticas de preservación de los mamíferos con otros países del Atlántico sur, como sus vecinos Argentina y Uruguay, en procura de crear "un gran santuario".
Brasil: gobierno decreta santuario de ballenas y delfines contra cazadores.
RIO DE JANEIRO. El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, firmó esta semana un decreto que considera las aguas jurisdiccionales de la costa de su país un santuario de ballenas y delfines y refuerza la prohibición de su caza, permitiendo apenas estudios o avistamiento turístico.
Según el decreto presidencial publicado en el Diario Oficial brasileño y que hacía tiempo era reclamado por grupos ecologistas, "sólo están permitidos la investigación científica y el aprovechamiento turístico ordenado".
Solamente se podrán realizar pesquisas científicas no letales con esos animales y a nivel turístico se permitirán visitas de áreas visibles sobre la costa, como el caso del Archipiélago de Abrolhos, en el estado de Bahia.
El decreto refuerza la prohibición decidida hace 21 años con una ley que prohibe la caza de ballenas y delfines en aguas brasileñas. Además, el gobierno deberá defender la preservación de esos mamíferos a nivel internacional en foros y actividades diplomáticas de carácter ambiental.
De acuerdo con lo expresado por el ministro de Medio Ambiente, Carlos Minc, en una entrevista con la estatal Agencia Brasil, "la creación de un santuario es un aviso para los depredadores", principalmente ante la presión internacional de países como Japón para que se autorice la caza.
Entre otras misiones, Minc dijo que Brasil podrá buscar mecanismos de cooperación en materia de políticas de preservación de los mamíferos con otros países del Atlántico sur, como sus vecinos Argentina y Uruguay, en procura de crear "un gran santuario".