Cabrados por la prohibición de asirtir menores a corridas de toros
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Prohibir que los menores vayan a los toros es un atentado contra la libertad»
ROSARIO PÉREZ. MADRID
El Consejo Vasco de Espectáculos ha aprobado el proyecto del nuevo Reglamento taurino del País Vasco, que recoge que ningún menor de 16 años podría ir a los toros si no va acompañado de un adulto. Después de pasar por el período de alegaciones y de la aprobación del Consejo del Gobierno autonómico, podría entrar en vigor la próxima temporada. Esta nueva normativa ha causado sorpresa e indignación en el mundo del toro. De ahí que sus máximos representantes en el Norte -Luis Díaz de Lezana, presidente de la Comisión Taurina de la Junta Administrativa de la plaza de Bilbao; Óscar Chopera, propietario y empresario del coso donostiarra de Illumbe, y Ramón Garín, presidente de la Comisión Taurina de Vitoria- hayan enviado un escrito al director de Juegos y Espectáculos, Aitor Uriarte. «En esta carta hemos expresado nuestra sorpresa, porque entendemos que, si se hace un borrador, se debería haber contado con las tres plazas más importantes del País Vasco (Bilbao y San Sebastián, de primera categoría; y Vitoria, de segunda)», señala Díaz de Lezana. El presidente de la Comisión de Vista Alegre y vicepresidente de la Junta se muestra «en total desacuerdo con esta prohibición». Asegura que es «un atentado contra la libertad de expresión». «Lo único que se consigue -subraya- es restar afición a futuras generaciones». Además, considera incoherente la normativa: «Se habla de un espectáculo violento, cuando la violencia la tenemos, desgraciadamente, a diario en nuestras calles. La juventud ve escenas de la Ertzaintza contra los radicales que son auténticas batallas campales. Eso sí que es grave».
Aficionado de pro y profundo conocedor de la Fiesta, Luis Díaz de Lezana confía en que triunfe la cordura y el sentido común. «Parece ser -explica- que en el primer borrador se impedía la entrada a los menores y luego se atenuó especificando que podían ir en compañía de un adulto». En este orden, se ha desviado de la senda de Cataluña, donde se prohíbe el acceso a los menores de catorce años, ley que se cumple a rajatabla pese al malestar de muchos aficionados, que no pueden adentrar a los más pequeños en la cultura taurina y en sus múltiples valores. «Aquí eso no lo permitiríamos, porque los vascos somos muy amigos de nuestras tradiciones». Y recuerda el arraigo de la tauromaquia en esta tierra: «Hablamos de una Fiesta genuinamente vasca. Los toros empiezan en el Norte; aquí pastaban las ganaderías, aunque luego pasaron al sur; aquí nacieron los inventores del toreo a pie -glosa-. Así se refleja en la Tauromaquia de Goya, con Martincho o Lecumberri por ejemplo».
Díaz de Lezana reivindica el derecho a ir a los toros en una época en la que «hablamos todo el santo día de democracia y libertad». «Si vivimos en un país libre, que lo sea para todo -aboga-. Al señor que no le gusten las corridas, que no vaya, pero a los demás que nos deje tranquilos». Y no cree que exista un trasfondo político: «No, al contrario. Hasta la fecha hemos tenido apoyo del Gobierno Vasco. Salvo en los dos últimos años, el lehendakari siempre ha asistido a la plaza, incluso al desembarque, generalmente al de Victorino. Y el alcalde, y hablamos de un alcalde nacionalista, Iñaki Azkuna, es presidente de la Junta Administrativa y acude a casi todas las corridas».
Bilbao, que cuenta con innúmeros y grandes aficionados, ha batido records de asistencia a los toros durante las últimas siete temporadas. Illumbe, de la mano de la familia Chopera, ha renacido la afición en San Sebastián y el movimiento económico se acrecienta cada Semana Grande. La Fiesta se vive con pasión en el País Vasco y en la savia fresca está su futuro. «Por ello -concluye Díaz de Lezana-, no se puede quitar a la juventud de un plumazo».
ROSARIO PÉREZ. MADRID
El Consejo Vasco de Espectáculos ha aprobado el proyecto del nuevo Reglamento taurino del País Vasco, que recoge que ningún menor de 16 años podría ir a los toros si no va acompañado de un adulto. Después de pasar por el período de alegaciones y de la aprobación del Consejo del Gobierno autonómico, podría entrar en vigor la próxima temporada. Esta nueva normativa ha causado sorpresa e indignación en el mundo del toro. De ahí que sus máximos representantes en el Norte -Luis Díaz de Lezana, presidente de la Comisión Taurina de la Junta Administrativa de la plaza de Bilbao; Óscar Chopera, propietario y empresario del coso donostiarra de Illumbe, y Ramón Garín, presidente de la Comisión Taurina de Vitoria- hayan enviado un escrito al director de Juegos y Espectáculos, Aitor Uriarte. «En esta carta hemos expresado nuestra sorpresa, porque entendemos que, si se hace un borrador, se debería haber contado con las tres plazas más importantes del País Vasco (Bilbao y San Sebastián, de primera categoría; y Vitoria, de segunda)», señala Díaz de Lezana. El presidente de la Comisión de Vista Alegre y vicepresidente de la Junta se muestra «en total desacuerdo con esta prohibición». Asegura que es «un atentado contra la libertad de expresión». «Lo único que se consigue -subraya- es restar afición a futuras generaciones». Además, considera incoherente la normativa: «Se habla de un espectáculo violento, cuando la violencia la tenemos, desgraciadamente, a diario en nuestras calles. La juventud ve escenas de la Ertzaintza contra los radicales que son auténticas batallas campales. Eso sí que es grave».
Aficionado de pro y profundo conocedor de la Fiesta, Luis Díaz de Lezana confía en que triunfe la cordura y el sentido común. «Parece ser -explica- que en el primer borrador se impedía la entrada a los menores y luego se atenuó especificando que podían ir en compañía de un adulto». En este orden, se ha desviado de la senda de Cataluña, donde se prohíbe el acceso a los menores de catorce años, ley que se cumple a rajatabla pese al malestar de muchos aficionados, que no pueden adentrar a los más pequeños en la cultura taurina y en sus múltiples valores. «Aquí eso no lo permitiríamos, porque los vascos somos muy amigos de nuestras tradiciones». Y recuerda el arraigo de la tauromaquia en esta tierra: «Hablamos de una Fiesta genuinamente vasca. Los toros empiezan en el Norte; aquí pastaban las ganaderías, aunque luego pasaron al sur; aquí nacieron los inventores del toreo a pie -glosa-. Así se refleja en la Tauromaquia de Goya, con Martincho o Lecumberri por ejemplo».
Díaz de Lezana reivindica el derecho a ir a los toros en una época en la que «hablamos todo el santo día de democracia y libertad». «Si vivimos en un país libre, que lo sea para todo -aboga-. Al señor que no le gusten las corridas, que no vaya, pero a los demás que nos deje tranquilos». Y no cree que exista un trasfondo político: «No, al contrario. Hasta la fecha hemos tenido apoyo del Gobierno Vasco. Salvo en los dos últimos años, el lehendakari siempre ha asistido a la plaza, incluso al desembarque, generalmente al de Victorino. Y el alcalde, y hablamos de un alcalde nacionalista, Iñaki Azkuna, es presidente de la Junta Administrativa y acude a casi todas las corridas».
Bilbao, que cuenta con innúmeros y grandes aficionados, ha batido records de asistencia a los toros durante las últimas siete temporadas. Illumbe, de la mano de la familia Chopera, ha renacido la afición en San Sebastián y el movimiento económico se acrecienta cada Semana Grande. La Fiesta se vive con pasión en el País Vasco y en la savia fresca está su futuro. «Por ello -concluye Díaz de Lezana-, no se puede quitar a la juventud de un plumazo».