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Las escuelas taurinas tienen que cambiar el método de enseñanza
ROQUETAS DE MAR.- El VIII Encuentro Andaluz de Escuelas de Tauromaquia celebrado el fin de semana en Roquetas concluyo con una interesante mesa redonda, donde se debatió sobre el futuro de las escuelas taurinas en Andalucía. En esta mesa redonda, participaron Felipe Díaz Murillo, director gerente de la Escuela Taurina de Madrid, Fernando Macedo, presidente de la Federación de Escuelas Taurinas y Eduardo Ordóñez, presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas. La mesa estuvo moderada por el exmatador de toros, Antonio Lozano.
Felipe Díaz Murillo dejo constancia de que “las escuelas taurinas han evolucionado en calidad y en cantidad. En Andalucía se ha producido una gran expansión de las escuelas taurina porque las jóvenes promesas tienen claro que ir a una escuela supone aprender técnicamente el oficio de torero. Pero hay algo muy claro y es que los alumnos han disminuido en las escuelas taurinas con el paso del tiempo. Antes de la muerte del Yiyo en la esuela de Madrid había 200 alumnos, hoy hay 80”.
Díaz Murillo matizo que “en la actualidad para aprender a ser torero hay que torear, y si no se va a una escuela es mas difícil participar en festejos, becerradas y novilladas. Cada día es mas frecuente que los alumnos se cambien de una escuela a otra, con arreglo a las posibilidades de que esa escuela tenga capacidad para hacer un gran numero de festejos, y pasa a un segundo plano la mayor o menor calidad docente”.
El director gerente de la Escuela Taurina de Madrid mostró su preocupación porque la gente joven no está informada de lo que es la fiesta de los toros. “Cada vez hay mas espectadores y menos aficionados en los toros, cada vez hay menos chicos en las plazas de toros. Hay que entrar en la juventud de alguna manera. En los colegios se niegan a que se les hable de toros, no es fácil llevar la fiesta de los toros a los colegios”.
Fernando Macedo, presidente de la Federación de Escuelas Taurinas fue muy critico con la retransmisión masiva de novilladas por parte de las televisiones, al considerar que muchas veces “son mas protagonistas los padres del joven novillero, que el propio novillero en esas retransmisiones”. “No hay que olvidar lo que representan las Escuelas Taurinas en este país y por ello se debe hacer un análisis si se esta haciendo bien el trabajo en la propia escuela”.
Macedo también puso énfasis en que “muchos chavales llegan a la escuela y quieren saber más que los profesores”. El dirigente de la Federación de Escuelas Taurinas señaló que “se esta bajando el nivel de exigencia, y los chavales no le dan importancia a lo que se esta haciendo con ellos”.
“Los padres deben irse a los tendidos y no bajar al callejón, puesto que esto se ha convertido en un circo mediático. El padre le da instrucciones al chico, incluso aunque sea lo contrario a lo que le indica el profesor y la madre también es entrevistada para ser conocida y famosa. Esto no puede ser así, puesto que tenemos que dar la imagen de un espectáculo integro, y no lo que está ocurriendo con alguna televisión publica que hace precisamente eso”, dijo Macedo.
Finalmente, Eduardo Ordóñez, presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas resaltó que “hay que reflexionar sobre el modelo de escuela taurina que queremos de cara al futuro. Es cierto que se ha hecho un gran trabajo, y muchas de ellas han obtenido grandes frutos, y esta claro que el futuro de la fiesta pasa por las escuelas taurinas, pero ahora tenemos que subir un peldaño mas, y por ello tenemos que tener claro lo que queremos”.
Felipe Díaz Murillo también destacó que “podemos enseñar mucho en las Escuelas, pero la mayor parte de los novilleros de hoy día no saben colocarse el capote de paseo para hacer el paseíllo, otros muchos no saben precisamente colocarse para hacer el paseíllo, otros salen a saludar sin llevar colocada la montera, la petición de cambio hay que hacerla con estilo y bien hecho y no hacerlo de cualquier manera. Son pequeños detalles que hay que cuidar mucho, aunque técnicamente se les enseñe mucho, hay otros detalles que precisamente no se cuidan, y es donde hay que hacer mas hincapié”.
ROQUETAS DE MAR.- El VIII Encuentro Andaluz de Escuelas de Tauromaquia celebrado el fin de semana en Roquetas concluyo con una interesante mesa redonda, donde se debatió sobre el futuro de las escuelas taurinas en Andalucía. En esta mesa redonda, participaron Felipe Díaz Murillo, director gerente de la Escuela Taurina de Madrid, Fernando Macedo, presidente de la Federación de Escuelas Taurinas y Eduardo Ordóñez, presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas. La mesa estuvo moderada por el exmatador de toros, Antonio Lozano.
Felipe Díaz Murillo dejo constancia de que “las escuelas taurinas han evolucionado en calidad y en cantidad. En Andalucía se ha producido una gran expansión de las escuelas taurina porque las jóvenes promesas tienen claro que ir a una escuela supone aprender técnicamente el oficio de torero. Pero hay algo muy claro y es que los alumnos han disminuido en las escuelas taurinas con el paso del tiempo. Antes de la muerte del Yiyo en la esuela de Madrid había 200 alumnos, hoy hay 80”.
Díaz Murillo matizo que “en la actualidad para aprender a ser torero hay que torear, y si no se va a una escuela es mas difícil participar en festejos, becerradas y novilladas. Cada día es mas frecuente que los alumnos se cambien de una escuela a otra, con arreglo a las posibilidades de que esa escuela tenga capacidad para hacer un gran numero de festejos, y pasa a un segundo plano la mayor o menor calidad docente”.
El director gerente de la Escuela Taurina de Madrid mostró su preocupación porque la gente joven no está informada de lo que es la fiesta de los toros. “Cada vez hay mas espectadores y menos aficionados en los toros, cada vez hay menos chicos en las plazas de toros. Hay que entrar en la juventud de alguna manera. En los colegios se niegan a que se les hable de toros, no es fácil llevar la fiesta de los toros a los colegios”.
Fernando Macedo, presidente de la Federación de Escuelas Taurinas fue muy critico con la retransmisión masiva de novilladas por parte de las televisiones, al considerar que muchas veces “son mas protagonistas los padres del joven novillero, que el propio novillero en esas retransmisiones”. “No hay que olvidar lo que representan las Escuelas Taurinas en este país y por ello se debe hacer un análisis si se esta haciendo bien el trabajo en la propia escuela”.
Macedo también puso énfasis en que “muchos chavales llegan a la escuela y quieren saber más que los profesores”. El dirigente de la Federación de Escuelas Taurinas señaló que “se esta bajando el nivel de exigencia, y los chavales no le dan importancia a lo que se esta haciendo con ellos”.
“Los padres deben irse a los tendidos y no bajar al callejón, puesto que esto se ha convertido en un circo mediático. El padre le da instrucciones al chico, incluso aunque sea lo contrario a lo que le indica el profesor y la madre también es entrevistada para ser conocida y famosa. Esto no puede ser así, puesto que tenemos que dar la imagen de un espectáculo integro, y no lo que está ocurriendo con alguna televisión publica que hace precisamente eso”, dijo Macedo.
Finalmente, Eduardo Ordóñez, presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas resaltó que “hay que reflexionar sobre el modelo de escuela taurina que queremos de cara al futuro. Es cierto que se ha hecho un gran trabajo, y muchas de ellas han obtenido grandes frutos, y esta claro que el futuro de la fiesta pasa por las escuelas taurinas, pero ahora tenemos que subir un peldaño mas, y por ello tenemos que tener claro lo que queremos”.
Felipe Díaz Murillo también destacó que “podemos enseñar mucho en las Escuelas, pero la mayor parte de los novilleros de hoy día no saben colocarse el capote de paseo para hacer el paseíllo, otros muchos no saben precisamente colocarse para hacer el paseíllo, otros salen a saludar sin llevar colocada la montera, la petición de cambio hay que hacerla con estilo y bien hecho y no hacerlo de cualquier manera. Son pequeños detalles que hay que cuidar mucho, aunque técnicamente se les enseñe mucho, hay otros detalles que precisamente no se cuidan, y es donde hay que hacer mas hincapié”.
