Conocido montador de toros de Ayala atrapado por robo

Este conocido montador quiso probar que tipo de adrenalina se
siente ahora al robar y ser perseguido, sólo que no contaba con la
astucia de la Municipal de Cuautla. Foto: El Sol de Cuautla
* Se llevaba unos tenis y guantes tejidos
de un local en el centro de Cuautla
El Sol de Cuautla
26 de noviembre de 2007
Jesús Colín Tablas
Cuautla, Morelos.- Un conocido montador
de toros apodado "El Negro", de nombre
Esteban Marino Báez de 21 años de edad,
con domicilio en la calle Emilio Marmolejo
número 23 del municipio de Ayala, fue
detenido por oficiales de la Policía Municipal
luego de que una trabajadora de un local
con razón social "Zapaterías Rebelde", lo
señalara como quien momentos antes había
sustraído unos tenis de este negocio, por lo
cual estuvo a punto de ser puesto a
disposición del agente del Ministerio
Público, sólo que la parte ofendida a la mera
hora no quiso proceder en su contra y dejó
en libertad a este malandrín.
De acuerdo con las autoridades, al hacer recorridos sobre las calles de la ciudad, los elementos de la
policía municipal fueron solicitados por una dama de nombre Teresa Silva, quien es trabajadora del lugar
en cuestión, quien dijo que minutos antes dos sujetos habían entrado al negocio en que se encontraba
laborando, y que del mismo habían sustraído unos tenis color blanco y luego, sin más habían emprendido
la huída hacia la calle de Intrépida Barragana.
Por ello de manera inmediata los elementos de la Policía Municipal se dieron a la búsqueda de este sujeto,
logrando ubicarlo a pocos metros del negocio y deteniéndolo de manera inmediata para presentarlo ante la
parte ofendida, quien sin temor a equivocarse señaló al presunto como quien momentos antes había
sustraído la mercancía del negocio, por lo cual el sujeto fue trasladado a la base alegando que otro sujeto
que iba con él, era el que se había robado los tenis, pero al hacerle la revisión se le encontraron metidos
entre sus ropas.
Lo peor del caso es que una vez en la comandancia, a este sujeto se le hizo una revisión más detallada
encontrando que en su ropa interior llevaba escondidos dos pares de guantes tejidos, los cuales había
robado en algún otro negocio, y que al parecer nadie se percató de estos hechos, por lo cual este
montador fue recluido en los separos de la Policía Municipal para ser puesto ante el agente del Ministerio
Público del fuero común, luego de que se presentara la parte ofendida a reclamar su mercancía.
Sin embargo esto nunca ocurrió, pues aunque los oficiales se trasladaron al local de donde se había
robado los tenis para preguntarle si procedería en contra de este sujeto, el dueño del negocio se mostró renuente y desde adentro les indicó a los oficiales que ya había cerrado, y que no tenía intenciones de
levantar cargos en contra de este presunto ladrón, por lo cual el sujeto quedó en libertad luego de pagar
una multa por alterar el orden, así es como quedó de manifiesto "la tibieza" de este comerciante para
proceder en contra del presunto delincuente, para que luego no se queje si lo asaltan, pues permitió que
un criminal saliera impune.