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El Ayuntamiento de Torrelavega (Cantabria) no permitirá las atracciones con ponys ni de animales en cautividad.
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Noticias
El diariomontanes.es, 22 agosto 2008.
TORRELAVEGA
La alcaldesa no permitirá atracciones que exhiban animales en cautividad.
Las denuncias de ciudadanos por permitir estas 'diversiones' han llevado a una reflexión sobre la conveniencia de este tipo de espectáculos en las ferias.
N. BOLADO- Ningún animal que sea exhibido como atracción de feria y que esté sometido a obligada cautividad podrá exponerse en el recinto ferial el año que viene. Así lo adelantó ayer la alcaldesa de Torrelavega tras conocer las diferentes denuncias que la Guardia Civil había recibido por permitir que una docena de ponies se mantuvieran atados durante horas, girando constantemente, en las fiestas de La Patrona. De hecho, ayer, fue ésta la noticia más leída y comentada en la página digital de EL DIARIO MONTAÑÉS, y prácticamente todas las opiniones eran contrarias a que se permitiera este tipo de atracciones en las ferias.
En Cantabria está vigente una normativa, que afecta a toda Europa comunitaria, que tiene como objetivo asegurar el bienestar de los animales. Precisamente, y haciéndose eco de esa ley, y tras la denuncia de un grupo conservacionista de Madrid, tuvo el Mercado Nacional de Ganados que introducir una serie de mejoras que permitieran una mejor estancia de los animales que cada semana se ponen a la venta. Esta legislación obliga, no sólo a disponer de medios de transporte idóneos para estos animales (hay transportes de caballos que ya tienen que incluir climatizadores) y que no sean sometidos a prácticas lesivas.
Los ponies que han sido denunciados en Torrelavega (también han estado en otras ferias de la región) están sujetos por el cuello a una noria y giran constantemente mientras haya niños que quieran subir en ellos. El horario del recinto ferial comienza a las seis de la tarde y finaliza en torno a la una de la madrugada. Subir en estos caballitos enanos cuesta cuatro euros. En algunos lugares estos animales están en corrales, sueltos, sin tener que girar en una noria, y los niños pueden disfrutar de ellos dando un paseo por el recinto, pero los metros de suelo de las ferias son caros.
También se ha denunciado la presencia, en el Mercado Medieval, de animales que no disponían de la documentación apropiada según obligan los convenios internacionales, sobre su trazabilidad. El propietario debe disponer de la documentación de origen del animal (en este caso aves rapaces), cómo y cuando ha llegado a España y la factura de quien se lo vendió, que es quien tiene que aportar toda esta documentación.
El Seprona (servicio de la Guardia Civil para proteger la naturaleza) es quien formula estas denuncias y las autoridades competentes son quienes toman las decisiones finales. En unas ocasiones hacen las inspecciones en base a denuncias de ciudadanos, y en otras, de oficio. Exhibir estos animales en las ferias no es ilegal, otra cuestión es el índice de sensibilidad del público que asiste a los eventos festivos, en cuanto al uso de animales en condiciones que los propios ciudadanos no aceptan como atracción de feria, al menos en Torrelavega.
TORRELAVEGA
La alcaldesa no permitirá atracciones que exhiban animales en cautividad.
Las denuncias de ciudadanos por permitir estas 'diversiones' han llevado a una reflexión sobre la conveniencia de este tipo de espectáculos en las ferias.
N. BOLADO- Ningún animal que sea exhibido como atracción de feria y que esté sometido a obligada cautividad podrá exponerse en el recinto ferial el año que viene. Así lo adelantó ayer la alcaldesa de Torrelavega tras conocer las diferentes denuncias que la Guardia Civil había recibido por permitir que una docena de ponies se mantuvieran atados durante horas, girando constantemente, en las fiestas de La Patrona. De hecho, ayer, fue ésta la noticia más leída y comentada en la página digital de EL DIARIO MONTAÑÉS, y prácticamente todas las opiniones eran contrarias a que se permitiera este tipo de atracciones en las ferias.
En Cantabria está vigente una normativa, que afecta a toda Europa comunitaria, que tiene como objetivo asegurar el bienestar de los animales. Precisamente, y haciéndose eco de esa ley, y tras la denuncia de un grupo conservacionista de Madrid, tuvo el Mercado Nacional de Ganados que introducir una serie de mejoras que permitieran una mejor estancia de los animales que cada semana se ponen a la venta. Esta legislación obliga, no sólo a disponer de medios de transporte idóneos para estos animales (hay transportes de caballos que ya tienen que incluir climatizadores) y que no sean sometidos a prácticas lesivas.
Los ponies que han sido denunciados en Torrelavega (también han estado en otras ferias de la región) están sujetos por el cuello a una noria y giran constantemente mientras haya niños que quieran subir en ellos. El horario del recinto ferial comienza a las seis de la tarde y finaliza en torno a la una de la madrugada. Subir en estos caballitos enanos cuesta cuatro euros. En algunos lugares estos animales están en corrales, sueltos, sin tener que girar en una noria, y los niños pueden disfrutar de ellos dando un paseo por el recinto, pero los metros de suelo de las ferias son caros.
También se ha denunciado la presencia, en el Mercado Medieval, de animales que no disponían de la documentación apropiada según obligan los convenios internacionales, sobre su trazabilidad. El propietario debe disponer de la documentación de origen del animal (en este caso aves rapaces), cómo y cuando ha llegado a España y la factura de quien se lo vendió, que es quien tiene que aportar toda esta documentación.
El Seprona (servicio de la Guardia Civil para proteger la naturaleza) es quien formula estas denuncias y las autoridades competentes son quienes toman las decisiones finales. En unas ocasiones hacen las inspecciones en base a denuncias de ciudadanos, y en otras, de oficio. Exhibir estos animales en las ferias no es ilegal, otra cuestión es el índice de sensibilidad del público que asiste a los eventos festivos, en cuanto al uso de animales en condiciones que los propios ciudadanos no aceptan como atracción de feria, al menos en Torrelavega.
