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Falta de medidas municipales para esterilización de gatos callejeros. Málaga.
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Noticias
Diario Málaga Hoy, 28 septiembre 2008.
La invasión urbana de los gatos.
Miles de animales callejeros ocupan casas abandonadas y solares de Málaga sin control, lo que está creando conflictos entre vecinos que están a favor y en contra.
Raquel Garrido / Málaga | Los gatos callejeros se han convertido en un auténtico quebradero de cabeza para muchos. Son miles en toda la ciudad y se reproducen con demasiada facilidad. Viven en casas abandonadas y en los paseos marítimos de la ciudad donde tienen garantizado el alimento que la gente les da sin saber que está completamente prohibido por favorecer su masiva proliferación y la propagación de enfermedades.
No son peligrosos pero sí molestos para muchas personas que no quieren convivir con una colonia de estos felinos como vecinos. Las calles del centro histórico de la capital malagueña son las preferidas por estos gatos callejeros para instalarse por la gran cantidad de edificios abandonados y solares que hay.
Pero el problema no sería tan grave si no fuera porque la presencia de estas colonias está originando verdaderos conflictos entre los vecinos de la zona. Los hay que los defienden y les dan de comer a diario, y los que están hartos de denunciar esta preocupante situación.
En sólo unos días el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Málaga ha recibido 20 denuncias por este asunto. La última una referida a la calle Tomás de Cózar del casco histórico de la capital donde los vecinos llevan meses enfrentados por la presencia de estos animales.
Hasta uno de los vecinos, que a diario se encarga de que no les falte ni comida ni agua a los gatos que viven en los alrededores, reconoce que la situación se les ha ido de las manos. "Antes había pocos y nos venía bien para que se comieran las ratas y cucarachas que había por aquí, pero ahora ya hay demasiados", aseguró a este periódico.
El Ayuntamiento de Málaga está tratando de buscar una solución a este problema, cada vez más generalizado, y ha pedido la colaboración de la Sociedad Protectora de Animales de Málaga para lograr disuadir a la gente de que contribuya a que los gatos callejeros se sigan reproduciendo dándoles de comer.
Pero poco se puede hacer. José Carlos Cabra, presidente de esta organización, explicó que "no hay medios ni espacio suficientes para recoger a todos estos gatos". La única solución, en su opinión, es esterilizarlos para evitar que se sigan reproduciendo de forma tan masiva y evitar la propagación de enfermedades y la aparición de plagas de pulgas.
La mayoría de los felinos que viven abandonados en las calles de la ciudad están enfermos y el coste económico de esta operación sería disparatado.
Lo que sí está al alcance de todos es evitar que sigan proliferando. La Sociedad Protectora de Animales está colocando unos carteles informativos en los puntos más conflictivos para que los ciudadanos sepan que la ordenanza municipal prohíbe expresamente dar de comer a cualquier animal en la vía pública y les anima a que denuncien la existencia de una de estas colonias, que en algunos casos están formadas por más de 30 gatos.
La zona de Carlos Haya, el Hospital Civil, la Trinidad y El Ejido son otros de los puntos favoritos para los gatos callejeros que poco a poco van invadiendo la ciudad.
La invasión urbana de los gatos.
Miles de animales callejeros ocupan casas abandonadas y solares de Málaga sin control, lo que está creando conflictos entre vecinos que están a favor y en contra.
Raquel Garrido / Málaga | Los gatos callejeros se han convertido en un auténtico quebradero de cabeza para muchos. Son miles en toda la ciudad y se reproducen con demasiada facilidad. Viven en casas abandonadas y en los paseos marítimos de la ciudad donde tienen garantizado el alimento que la gente les da sin saber que está completamente prohibido por favorecer su masiva proliferación y la propagación de enfermedades.
No son peligrosos pero sí molestos para muchas personas que no quieren convivir con una colonia de estos felinos como vecinos. Las calles del centro histórico de la capital malagueña son las preferidas por estos gatos callejeros para instalarse por la gran cantidad de edificios abandonados y solares que hay.
Pero el problema no sería tan grave si no fuera porque la presencia de estas colonias está originando verdaderos conflictos entre los vecinos de la zona. Los hay que los defienden y les dan de comer a diario, y los que están hartos de denunciar esta preocupante situación.
En sólo unos días el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Málaga ha recibido 20 denuncias por este asunto. La última una referida a la calle Tomás de Cózar del casco histórico de la capital donde los vecinos llevan meses enfrentados por la presencia de estos animales.
Hasta uno de los vecinos, que a diario se encarga de que no les falte ni comida ni agua a los gatos que viven en los alrededores, reconoce que la situación se les ha ido de las manos. "Antes había pocos y nos venía bien para que se comieran las ratas y cucarachas que había por aquí, pero ahora ya hay demasiados", aseguró a este periódico.
El Ayuntamiento de Málaga está tratando de buscar una solución a este problema, cada vez más generalizado, y ha pedido la colaboración de la Sociedad Protectora de Animales de Málaga para lograr disuadir a la gente de que contribuya a que los gatos callejeros se sigan reproduciendo dándoles de comer.
Pero poco se puede hacer. José Carlos Cabra, presidente de esta organización, explicó que "no hay medios ni espacio suficientes para recoger a todos estos gatos". La única solución, en su opinión, es esterilizarlos para evitar que se sigan reproduciendo de forma tan masiva y evitar la propagación de enfermedades y la aparición de plagas de pulgas.
La mayoría de los felinos que viven abandonados en las calles de la ciudad están enfermos y el coste económico de esta operación sería disparatado.
Lo que sí está al alcance de todos es evitar que sigan proliferando. La Sociedad Protectora de Animales está colocando unos carteles informativos en los puntos más conflictivos para que los ciudadanos sepan que la ordenanza municipal prohíbe expresamente dar de comer a cualquier animal en la vía pública y les anima a que denuncien la existencia de una de estas colonias, que en algunos casos están formadas por más de 30 gatos.
La zona de Carlos Haya, el Hospital Civil, la Trinidad y El Ejido son otros de los puntos favoritos para los gatos callejeros que poco a poco van invadiendo la ciudad.
