El «idilio» que la Málaga taurina ha mantenido con estos empresarios ha terminado de mala forma. Bajo su dirección se alcanzó la categoría de plaza de primera y la capital malagueña se convirtió en cita ineludible para los primeros espadas. José Tomás siempre incluía La Malagueta en su temporada y las fotos de largas colas evidenciaban la revitalización de la Fiesta en la ciudad. Pero esta relación se ha roto por cuestiones económicas. Fuentes del ente supramunicipal explicaron a ABC que el embargo se ha adoptado tras agotarse las negociaciones ante el desacuerdo de las partes por la cantidad reclamada. Finales de 2011 marcó el inicio de este litigio, periodo en el que las autoridades de las que depende el coso solicitaron a los diestros el pago de 750.000 euros por el canon de dos temporadas. Una cantidad que la Diputación malagueña eleva hasta 1,2 millones después de sumarle otras deudas de los derechos televisivos y los intereses de demora.
Las citadas fuentes precisaron que a través de la vía ejecutiva se llevará a cabo el embargo de bienes de los componentes de la UTE de forma solidaria, y se ha procedido a la ejecución administrativa de las garantías existentes, consistente en importe correspondiente a un año de canon. El miércoles se dio un paso más y el Patronato Provincial de Recaudación tramitó el embargo de 140.000 euros depositados en una cuenta común.
La empresa ha realizado varios movimientos para tratar de evitar el pago de tan importante cantidad o, al menos, rebajarla. Inicialmente solicitó una quita en el canon de 200.000 euros por las pérdidas sufridas a causa de las obras que se realizaron en La Malagueta y que impidieron programar la temporada completa. También presentó facturas de trabajos de construcción y remodelación llevadas a cabo en el inmueble y solicitó el pago de la publicidad de la bienal Málaga en Flamenco, que estaba impresa en el reverso de las entradas en la temporada de 2007.
Los técnicos de la Diputación rechazaron estas alegaciones y solicitaron el pago del montante total adeudado. «Es un dinero de los malagueños», se insistió. El empresario taurino Simón Casas no queda exento de sus responsabilidades a pesar de haber vendido semanas antes de que concluyera la adjudicación de la plaza su participación (el 4 por ciento) en la sociedad del diestro Javier Conde, según señalaron las citadas fuentes.
La UTE formada por los dos maestros y Fernando Puche se disolvió en medio de la polémica después de que el conocido empresario, que presidió el Málaga C.F., anunciase que lo dejaba durante la presentación de los carteles de la pasada Feria de Agosto. «Me voy muy desilusionado», se limitó a declarar entonces.