Gallos amputados y drogados para pelear
Unas apuestas que, según confirmó la Policía,
solían rondar entre los 300 y 600 euros, pero que incluso podían llegar a
alcanzar cantidades mayores, como en la denominada «pelea del millón»,
en la cual los habituales clientes podía apostar hasta unos diez mil
euros.
Detenidos por la Policía, acusados de maltrato animal, los organizadores
de estas peleas ilegales, no sólo se conformaban con entrenar a los
gallos para que lograsen un rendimiento ideal en las batallas, además,
como parte de la preparación, y para que su carácter fuese más agresivo,
les amputaban las crestas y les suministraban ciertas sustancias para
que aguantasen más, como cafeína o anfetaminas.
Estos combates se celebraban normalmente los fines de semana en un local
de Callosa de Segura (Alicante). Hasta allí se desplazaban varios
espectadores que procedían de provincias cercanas a Alicante y que
pagaban por entrada diez euros.
La investigación, iniciada hace aproximadamente un mes, comenzó tras la
alerta que saltó sobre varios integrantes de una asociación cultural
constituida por la cría y exportación de gallos de la raza combatiente
español.
En el registro del local, los agentes incautaron unos siete mil euros en
efectivo, varios tarros con multitud de espolones de patas
pertenecientes a gallos muertos, dos petos para pesar gallos, limas para
los espolones, sustancias utilizadas para aumentar la agresividad de
los gallos y diversa documentación.
Un caso frecuente
Las peleas ilegales entre gallos son frecuentes en España. Esta misma
semana, también en otra operación realizada en Málaga, la Policía
encontró 75 gallos que eran utilizados en estas peleas. Esta operación,
por el número de ejemplares hallado, es una de las más importantes de
la provincia, sólo superado anteriormente por la redada de agosto de
2010, en la cual la Policía Local llegó a intervir al menos 160 gallos
de peleas en las azoteas de varios bloques de pisos en un barrio de
Málaga. Allí los agentes desmantelaron numerosas jaulas y criaderos de
animales tras la alerta de quejas vecinales por ruido.
Una práctica legal en algunos sitios de España
A pesar de que las peleas de gallos son una actividad ilegal en la mayor
parte de los países del mundo, se permite en países hispanoamericanos,
en Filipinas, y en dos comunidades autónomas de nuestro país: en la
andaluza y la canaria. No obstante, también se organizan de manera
clandestina en otros lugares. Estas actividades, que finalizan cuando
uno o los dos animales muere a consecuencia de las heridas, viene
acompañada de grandes apuestas por uno de los animales. Por ello, los
propietarios de los gallos suelen drogarlos, con el objetivo de que
actúen de forma más violenta, e incluso, en muchos casos, suelen
colocarles espolones cortantes para lograr elefecto.