La Junta elimina peces exóticos en zonas de conservación de los anfibios en Almería
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La Junta elimina peces exóticos en zonas de conservación de los anfibios en Almería
Se ha actuado para la eliminación de estos animales invasores en dos balsas donde amenazaban la supervivencia de especies en peligro como el sapo partero bético
Ejemplares de 'Carpín', especie invasora retirada de la Sierra de los Filabres
ALMERÍA.- Técnicos de la Consejería de Medio Ambiente han eliminado todos los individuos de peces exóticos (carpas, Cyprinus Carpio), de dos balsas situadas en la Sierra de los Filabres (Almería), las balsas de La Rosariera (Bacares) y El Prado (Fiñana).
En un medio semiárido como el que domina en la provincia de Almería los sistemas acuáticos no abundan. Por lo que la presencia de estas balsas resultan fundamentales para la supervivencia de especies de gran interés para la conservación como el sapo partero bético (Alytes dickhilleni), especie endémica de las Sierras Béticas y calificado como 'vulnerable' según los criterios de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza. Además, son refugio de otras especies de anfibios de más amplia distribución como la rana común (Rana perezi), el sapo común (Bufo bufo), o el sapillo moteado (Pelodytes punctatus).
Los peces exóticos como las carpas y carpines llegan a estas balsas introducidos por el hombre y suponen un grave peligro para el mantenimiento de estas poblaciones de anfibios en la zona ya que se alimentan de sus huevos y renacuajos. La presencia de unos pocos individuos de carpas en estas balsas puede llevar a la extinción local de estas especies.
La Consejería de Medio Ambiente ya ha realizado en otras ocasiones diversas actuaciones encaminadas a la mejora de la situación de los anfibios en la provincia de Almería, como el acondicionamiento de veinte enclaves acuáticos (balsas, abrevaderos…) por toda la Sierra de los Filabres
Las actuaciones de control de carpa llevadas a cabo en esta ocasión y que se repetirán próximamente en distintos puntos de la provincia de Granada, se desarrollan dentro del Programa para el Control de las Especies Exóticas Invasoras que la Consejería de Medio Ambiente lleva a cabo en las ocho provincias andaluzas. En el marco de este Programa, Medio Ambiente trabaja en la identificación de las especies foráneas que muestran un comportamiento invasor en Andalucía, con el fin de llevar a cabo el control o la erradicación de las mismas.
Bajo la denominación de especies exóticas se agrupan las especies de animales, hongos y plantas que son introducidas, transportadas o liberadas en lugares distintos de los que les son propios en su origen, y adquieren la consideración de invasoras cuando se adaptan al nuevo medio y compiten con animales autóctonos. La introducción de estos animales, ya sea accidental o intencionada, puede ocasionar la destrucción de hábitats enteros, la extinción local de especies, graves pérdidas económicas e incluso puede ser vector para enfermedades humanas.
Se ha actuado para la eliminación de estos animales invasores en dos balsas donde amenazaban la supervivencia de especies en peligro como el sapo partero bético
Ejemplares de 'Carpín', especie invasora retirada de la Sierra de los Filabres
ALMERÍA.- Técnicos de la Consejería de Medio Ambiente han eliminado todos los individuos de peces exóticos (carpas, Cyprinus Carpio), de dos balsas situadas en la Sierra de los Filabres (Almería), las balsas de La Rosariera (Bacares) y El Prado (Fiñana).
En un medio semiárido como el que domina en la provincia de Almería los sistemas acuáticos no abundan. Por lo que la presencia de estas balsas resultan fundamentales para la supervivencia de especies de gran interés para la conservación como el sapo partero bético (Alytes dickhilleni), especie endémica de las Sierras Béticas y calificado como 'vulnerable' según los criterios de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza. Además, son refugio de otras especies de anfibios de más amplia distribución como la rana común (Rana perezi), el sapo común (Bufo bufo), o el sapillo moteado (Pelodytes punctatus).
Los peces exóticos como las carpas y carpines llegan a estas balsas introducidos por el hombre y suponen un grave peligro para el mantenimiento de estas poblaciones de anfibios en la zona ya que se alimentan de sus huevos y renacuajos. La presencia de unos pocos individuos de carpas en estas balsas puede llevar a la extinción local de estas especies.
La Consejería de Medio Ambiente ya ha realizado en otras ocasiones diversas actuaciones encaminadas a la mejora de la situación de los anfibios en la provincia de Almería, como el acondicionamiento de veinte enclaves acuáticos (balsas, abrevaderos…) por toda la Sierra de los Filabres
Las actuaciones de control de carpa llevadas a cabo en esta ocasión y que se repetirán próximamente en distintos puntos de la provincia de Granada, se desarrollan dentro del Programa para el Control de las Especies Exóticas Invasoras que la Consejería de Medio Ambiente lleva a cabo en las ocho provincias andaluzas. En el marco de este Programa, Medio Ambiente trabaja en la identificación de las especies foráneas que muestran un comportamiento invasor en Andalucía, con el fin de llevar a cabo el control o la erradicación de las mismas.
Bajo la denominación de especies exóticas se agrupan las especies de animales, hongos y plantas que son introducidas, transportadas o liberadas en lugares distintos de los que les son propios en su origen, y adquieren la consideración de invasoras cuando se adaptan al nuevo medio y compiten con animales autóctonos. La introducción de estos animales, ya sea accidental o intencionada, puede ocasionar la destrucción de hábitats enteros, la extinción local de especies, graves pérdidas económicas e incluso puede ser vector para enfermedades humanas.