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La presidenta de la Comunidad de Madrid hará una normativa que permita dejar a los animales muertos en el campo.
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Noticias
Europa Press, 16 Marzo 2009
Aguirre hará una normativa que permita dejar a los animales muertos en el campo.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, anunció que elaborará una normativa autonómica que servirá como excepción a la legislación estatal donde se contemple que los animales que mueran en el campo, siempre que no sea por epidemia, puedan permanecer en su hábitat para que sirva de alimento a las aves rapaces que están en la región.
Tras soltar en la Dehesa de Sevilla La Nueva al águila imperial 'Susana', que después de seis meses de rehabilitación ya puede volar, Aguirre señaló que está "absolutamente decidida" a hacer una excepción con la normativa "que impide que los animales que mueren de muerte natural queden en el campo y sirvan de alimento a los buitres, águilas reales, águilas imperiales, a todas las rapaces".
De esta manera se refirió a una norma estatal que obliga a todas las comunidades autónomas a que los animales cuando pierden la vida en el campo, pasen a un vertedero autorizado. No obstante, el Gobierno regional tiene competencias para modificar dicha normativa. "Tenemos el compromiso de protección y defensa de las rapaces ibéricas", apostilló la presidenta en referencia a que éstas tienen problemas de alimento, lo que las impide que se puedan reproducir como deberían.
"Será muy higiénico la recogida de los animales que mueren de muerte natural pero es anti natural, las rapaces necesitan comer carroña y eso se produce en el campo", subrayó la jefa del Ejecutivo, quien señaló que la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño, tiene su encargo de hacer una normativa que permita que el animal muerto se quede en el campo "y que siga a la cadena natural para que pueda alimentarse las rapaces".
Sin embargo, la presidenta sí que aclaró que esta decisión afectaría sólo a animales como las vacas o las ovejas que mueren en el campo por problemas en el parto o ya de viejos. "Por supuesto, si hay peligro de que haya muerto (el animal) de alguna epidemia, como le pasa a los cerdos, que inmediatamente hay que matarlos a todos, por supuesto que no", apostilló, en relación a situaciones como las que se dieron con la enfermedad de las 'vacas locas'.
'SUSANA' YA ESTÁ EN LIBERTAD
Aguirre hizo este anuncio después de conocer a 'Susana', una hembra de águila imperial ibérica, de un año de edad, que ha estado desde septiembre en uno de los Hospitales de Recuperación de Fauna de la organización GREFA, gestionado en colaboración con la Comunidad de Madrid, rehabilitándose porque tenía su ala derecha rota "y estaba condenada a muerte" ya que no podía volar, y por lo tanto, sus limitaciones le impedían también alimentarse, explicó Aguirre.
'Susana' es una de los ejemplares de águila imperial en la Comunidad de Madrid que se suma a las 30 parejas de esta especie que en 2008 viven en la Comunidad de Madrid. Durante este año, el águila imperial ha recolonizado territorios de la región, sobre todo en la zona oeste, que llevaban años sin contar con esta especie, cuya población ha aumentado un 7 por ciento --en 2000 había 23 parejas y la mejora se empezó a notar en 2004, con la presencia de 26--.
En el caso de 'Susana', que se llama así por el nombre de su rehabilitadora, se la encontraron el pasado 11 de septiembre en Fuente El Saz de Jarama en un estado grave, débil, deshidratada, baja de peso y con problema en las garras, además de la rotura del ala. En el 'Hospital de fauna' fue sometida a distintas pruebas veterinarias y rehabilitación hasta que, recuperada su musculatura, ha podido ser dejada hoy en libertad.
Precisamente, en el momento en que la han dejado sola, ha tardado unos segundos en ponerse a volar porque estaba demasiado nerviosa y perdida. No obstante, enseguida ha cogido el vuelo y se ha posado en una encina situada a pocos metros. Sus cuidadores explicaron a los allí presentes que seguramente presentaba muchas taquicardias dada la nueva situación y que reposaría en el árbol hasta que ella se sintiera más tranquila.
'Susana' lleva, además, un localizador-emisor vía satélite y terrestre que durará al menos cuatro años --podrá reproducirse con cinco aproximadamente-- para que sus responsables sepan sus movimientos y esté localizada en todo momento por si sufre una recaída, y valorar, así, si los tratamientos han dado los resultados esperados.
Los programas para la recuperación de las aves rapaces que ha impulsado el Ejecutivo autonómico ha conseguido estabilizar y aumentar las poblaciones de otras aves como la del buitre negro, de las que ya hay 95 parejas; la cigüeña negra, especie de la cual hay en la Comunidad 10 parejas; o como el águila real, de la cual hay contabilizadas 16 parejas.
Para recuperar estas especies, la Comunidad ha destinado en los dos últimos años un total de 2 millones de euros dedicadas a medidas centradas a luchar frente a la mortalidad por el uso ilegal de venenos o choques de tendidos eléctricos, o en la mejora de la calidad de vida del hábitat de esta especie mediante el afianzamiento de las plataformas de nidificación no utilizadas y la correcta gestión y planificación agraria, cinegética y forestal de estos territorios.
Además, se ha conseguido incrementar la productividad de la especie con perímetros temporales de protección de los nidos, facilitando el alimento en el entorno de nidos problemáticos, con aficiones para evitar la caída de los nidos y con programas específicos de cría en cautividad de la especie. Asimismo, "el amor de los ciudadanos por los animales" ha permitido recuperar (hasta en un 40 por ciento) a aquellos que, enfermos, no podían subsistir solos.
En el caso de la recuperación, la región cuenta con tres centros de Recuperación de Fauna, uno propio en Buitrago de Lozoya, otro en Majadahonda (donde estuvo 'Susana') y otro en la Casa de Campo, en colaboración con Brinzal. Estos 'hospitales' atienden una media de 14 ejemplares cada día. En concreto, en 2008, recibieron más de 4.000 animales heridos, de los que más de la mitad lograron sobrevivir.
Aguirre hará una normativa que permita dejar a los animales muertos en el campo.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, anunció que elaborará una normativa autonómica que servirá como excepción a la legislación estatal donde se contemple que los animales que mueran en el campo, siempre que no sea por epidemia, puedan permanecer en su hábitat para que sirva de alimento a las aves rapaces que están en la región.
Tras soltar en la Dehesa de Sevilla La Nueva al águila imperial 'Susana', que después de seis meses de rehabilitación ya puede volar, Aguirre señaló que está "absolutamente decidida" a hacer una excepción con la normativa "que impide que los animales que mueren de muerte natural queden en el campo y sirvan de alimento a los buitres, águilas reales, águilas imperiales, a todas las rapaces".
De esta manera se refirió a una norma estatal que obliga a todas las comunidades autónomas a que los animales cuando pierden la vida en el campo, pasen a un vertedero autorizado. No obstante, el Gobierno regional tiene competencias para modificar dicha normativa. "Tenemos el compromiso de protección y defensa de las rapaces ibéricas", apostilló la presidenta en referencia a que éstas tienen problemas de alimento, lo que las impide que se puedan reproducir como deberían.
"Será muy higiénico la recogida de los animales que mueren de muerte natural pero es anti natural, las rapaces necesitan comer carroña y eso se produce en el campo", subrayó la jefa del Ejecutivo, quien señaló que la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño, tiene su encargo de hacer una normativa que permita que el animal muerto se quede en el campo "y que siga a la cadena natural para que pueda alimentarse las rapaces".
Sin embargo, la presidenta sí que aclaró que esta decisión afectaría sólo a animales como las vacas o las ovejas que mueren en el campo por problemas en el parto o ya de viejos. "Por supuesto, si hay peligro de que haya muerto (el animal) de alguna epidemia, como le pasa a los cerdos, que inmediatamente hay que matarlos a todos, por supuesto que no", apostilló, en relación a situaciones como las que se dieron con la enfermedad de las 'vacas locas'.
'SUSANA' YA ESTÁ EN LIBERTAD
Aguirre hizo este anuncio después de conocer a 'Susana', una hembra de águila imperial ibérica, de un año de edad, que ha estado desde septiembre en uno de los Hospitales de Recuperación de Fauna de la organización GREFA, gestionado en colaboración con la Comunidad de Madrid, rehabilitándose porque tenía su ala derecha rota "y estaba condenada a muerte" ya que no podía volar, y por lo tanto, sus limitaciones le impedían también alimentarse, explicó Aguirre.
'Susana' es una de los ejemplares de águila imperial en la Comunidad de Madrid que se suma a las 30 parejas de esta especie que en 2008 viven en la Comunidad de Madrid. Durante este año, el águila imperial ha recolonizado territorios de la región, sobre todo en la zona oeste, que llevaban años sin contar con esta especie, cuya población ha aumentado un 7 por ciento --en 2000 había 23 parejas y la mejora se empezó a notar en 2004, con la presencia de 26--.
En el caso de 'Susana', que se llama así por el nombre de su rehabilitadora, se la encontraron el pasado 11 de septiembre en Fuente El Saz de Jarama en un estado grave, débil, deshidratada, baja de peso y con problema en las garras, además de la rotura del ala. En el 'Hospital de fauna' fue sometida a distintas pruebas veterinarias y rehabilitación hasta que, recuperada su musculatura, ha podido ser dejada hoy en libertad.
Precisamente, en el momento en que la han dejado sola, ha tardado unos segundos en ponerse a volar porque estaba demasiado nerviosa y perdida. No obstante, enseguida ha cogido el vuelo y se ha posado en una encina situada a pocos metros. Sus cuidadores explicaron a los allí presentes que seguramente presentaba muchas taquicardias dada la nueva situación y que reposaría en el árbol hasta que ella se sintiera más tranquila.
'Susana' lleva, además, un localizador-emisor vía satélite y terrestre que durará al menos cuatro años --podrá reproducirse con cinco aproximadamente-- para que sus responsables sepan sus movimientos y esté localizada en todo momento por si sufre una recaída, y valorar, así, si los tratamientos han dado los resultados esperados.
Los programas para la recuperación de las aves rapaces que ha impulsado el Ejecutivo autonómico ha conseguido estabilizar y aumentar las poblaciones de otras aves como la del buitre negro, de las que ya hay 95 parejas; la cigüeña negra, especie de la cual hay en la Comunidad 10 parejas; o como el águila real, de la cual hay contabilizadas 16 parejas.
Para recuperar estas especies, la Comunidad ha destinado en los dos últimos años un total de 2 millones de euros dedicadas a medidas centradas a luchar frente a la mortalidad por el uso ilegal de venenos o choques de tendidos eléctricos, o en la mejora de la calidad de vida del hábitat de esta especie mediante el afianzamiento de las plataformas de nidificación no utilizadas y la correcta gestión y planificación agraria, cinegética y forestal de estos territorios.
Además, se ha conseguido incrementar la productividad de la especie con perímetros temporales de protección de los nidos, facilitando el alimento en el entorno de nidos problemáticos, con aficiones para evitar la caída de los nidos y con programas específicos de cría en cautividad de la especie. Asimismo, "el amor de los ciudadanos por los animales" ha permitido recuperar (hasta en un 40 por ciento) a aquellos que, enfermos, no podían subsistir solos.
En el caso de la recuperación, la región cuenta con tres centros de Recuperación de Fauna, uno propio en Buitrago de Lozoya, otro en Majadahonda (donde estuvo 'Susana') y otro en la Casa de Campo, en colaboración con Brinzal. Estos 'hospitales' atienden una media de 14 ejemplares cada día. En concreto, en 2008, recibieron más de 4.000 animales heridos, de los que más de la mitad lograron sobrevivir.
