Varias personas presencian y apuestan por dos gallos en plena pelea (A. de la Gama)
La
Costa del Sol se convirtió en los últimos meses en centro neurálgico de
las peleas de gallos clandestinas y, más concretamente, las viviendas
del Monarca saudí, utilizadas como espeluznantes corrales de las
sangrientas luchas.
La Policía desmanteló el
pasado martes el coso ilegal en los bajos de las viviendas de las
Albarizas: toda una alquería de aves metropolitanas, revoloteando en
pleno casco urbano de Marbella. Los agentes intervinieron setenta y cinco especies de pelea en la redada,
un auténtico botín con plumas puesto que cada gallo estaría valorado en
tres mil euros. Y su precio se dispara aún más en el mercado negro.
Esta
vez 140 hombres de azul y helicópteros sobrevolaban la ciudad cuando
algún ciudadano despistado se preguntaba si habrían detenido a más gente
de la trama Malaya… Pero esta vez el deambular de agentes tenía otro
cometido: acabar con las peleas ilegales de gallos dentro de la ciudad.
Crestas amputadas
Al
mismo tiempo que la operación marbellí, en Callosa de Segura -un pueblo
de Alicante- también la UDYCO detenía a 46 personas en otro corral de
peleas ilegales. Los promotores de los combates entrenaban a los
animales para exacerbar su agresividad, utilizaban gallos con las crestas amputadas y les suministraban anfetaminas para activarlos en las peleas.
La
entrada al corral costaba 10 euros y, ya en el interior, las apuestas
habituales oscilaban entre los 300 y los 600 euros. Llegaron a
celebrarse contiendas, las llamadas “peleas del millón”, en las que los
participantes podían llegar a jugarse hasta 10.000 euros por combate.
La
denominada ‘operación Cresta’ en Alicante fue llevada a cabo por la
Brigada Provincial de Policía Judicial-Unidad de Droga y Crimen
Organizado. En Marbella fueron los operativos de la Comisaría Provincial
junto a efectivos de la UIP y Goes los que intervinieron, además del
criadero de gallos, cerca de cinco kilos de sustancias estupefacientes,
armas, dinero y varios kilos de joyas.
Cuatro de los 33 detenidos han ingresado en prisión.
Sólo sobrevive el ganador
La
Sociedad Protectora de Animales Adana, ante las últimas redadas de la
‘Operación Cresta’ en Alicante y Andalucía, han vuelto a levantar su
estandarte para proteger a este animal. La crisis ha acelerado la
picaresca y estas actividades ilegales ha puesto en alerta a las Fuerzas
de Seguridad ante la proliferación de las timbas ilegales que mueven cantidades millonarias de dinero en apuestas fuera de la ley.
Combates
en los que sólo sobrevive el ganador y su contrincante es sacrificado.
La Costa del Sol es uno de los puntos neurálgicos de estas peleas
clandestinas. El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia
Civil (Seprona) lleva luchando contra estas prácticas ilegales desde
hace años: “Sólo con recorrer algunos barrios de distintos lugares que
tenemos comprobados, podemos ver cómo campan a sus anchas por las
aceras”. Incluso accediendo a las imágenes que ofrece el buscador Google
en Internet, se pueden apreciar algunos edificios con criaderos en
azoteas de ciudades de Andalucía.