Proyecto para mataderos
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Bruselas, 10 jun (EFE).- Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) aprobarán este mes, en Luxemburgo, la implantación de un "certificado" que acredite que la persona encargada de sacrificar animales tiene los conocimientos necesarios para reducir su sufrimiento, informaron hoy fuentes comunitarias.
El Consejo de ministros de Agricultura, que se celebrará los días 22 y 23, acordará previsiblemente una normativa para imponer exigencias más estrictas con el objetivo de mejorar lo máximo posible el bienestar y rebajar el dolor de los animales durante su sacrificio, tanto del ganado como de aquellos matados por su piel.
La propuesta que pactarán los Veintisiete incluye, entre otras medidas, la imposición de un "certificado" o "permiso especial" para los matarifes o las personas que se encarguen de sacrificar los animales.
Para obtener esa licencia, será necesaria una formación y la persona que trabaje en los mataderos deberá tener ciertos conocimientos sobre los dolores del animal, técnicas de aturdimiento o el buen trato al ganado.
Se tratará de un certificado unificado, expedido por las autoridades competentes, aunque la formación pueda seguirse en distintos sitios, según las fuentes.
La Comisión Europea (CE) propuso que dicha licencia tuviera una validez de cinco años.
La normativa que votarán los países de la UE incluye también un mínimo de reglas estrictas a la hora del sacrificio y la posibilidad de que un país pueda endurecerlas.
Según las fuentes, la opción de tales "derogaciones" nacionales supone un giro hacia las tesis de los países del norte, mientras que los del sur, como España han pedido que la diversidad de normas sobre bienestar animal no se use después como "excusa" para boicotear las carnes que llegan a un país procedente de otros comunitarios.
En cuanto a los rituales, los países de la UE no han aceptado la petición del Parlamento Europeo, que solicitó eximir de las reglas para el bienestar animal las matanzas por motivos religiosos.
La propuesta incluye también la designación de un experto en bienestar animal en los mataderos.
Bruselas ha propuesto que en esos centros y en las explotaciones se evalúen la eficacia de los métodos para atontar a los animales y prevé que posteriormente se vigile que no están conscientes, en el momento en que son sacrificados.
Los fabricantes de material para aturdir deberán adjuntar instrucciones para garantizar que los animales sufren menos.
Unos 360 millones de cerdos, cabras, ovejas y terneros, así como muchos millones de aves son sacrificados en los mataderos de los países de la UE para el uso de su carne; otros 25 millones de animales, para emplear su piel y a estas cifras hay que añadir las matanzas excepcionales en masa por epidemias.EFE
El Consejo de ministros de Agricultura, que se celebrará los días 22 y 23, acordará previsiblemente una normativa para imponer exigencias más estrictas con el objetivo de mejorar lo máximo posible el bienestar y rebajar el dolor de los animales durante su sacrificio, tanto del ganado como de aquellos matados por su piel.
La propuesta que pactarán los Veintisiete incluye, entre otras medidas, la imposición de un "certificado" o "permiso especial" para los matarifes o las personas que se encarguen de sacrificar los animales.
Para obtener esa licencia, será necesaria una formación y la persona que trabaje en los mataderos deberá tener ciertos conocimientos sobre los dolores del animal, técnicas de aturdimiento o el buen trato al ganado.
Se tratará de un certificado unificado, expedido por las autoridades competentes, aunque la formación pueda seguirse en distintos sitios, según las fuentes.
La Comisión Europea (CE) propuso que dicha licencia tuviera una validez de cinco años.
La normativa que votarán los países de la UE incluye también un mínimo de reglas estrictas a la hora del sacrificio y la posibilidad de que un país pueda endurecerlas.
Según las fuentes, la opción de tales "derogaciones" nacionales supone un giro hacia las tesis de los países del norte, mientras que los del sur, como España han pedido que la diversidad de normas sobre bienestar animal no se use después como "excusa" para boicotear las carnes que llegan a un país procedente de otros comunitarios.
En cuanto a los rituales, los países de la UE no han aceptado la petición del Parlamento Europeo, que solicitó eximir de las reglas para el bienestar animal las matanzas por motivos religiosos.
La propuesta incluye también la designación de un experto en bienestar animal en los mataderos.
Bruselas ha propuesto que en esos centros y en las explotaciones se evalúen la eficacia de los métodos para atontar a los animales y prevé que posteriormente se vigile que no están conscientes, en el momento en que son sacrificados.
Los fabricantes de material para aturdir deberán adjuntar instrucciones para garantizar que los animales sufren menos.
Unos 360 millones de cerdos, cabras, ovejas y terneros, así como muchos millones de aves son sacrificados en los mataderos de los países de la UE para el uso de su carne; otros 25 millones de animales, para emplear su piel y a estas cifras hay que añadir las matanzas excepcionales en masa por epidemias.EFE