Una donación de 600.000 euros para pobres, misioneros y animales. Proaniplant. (Murcia).
archivado en:
Noticias
La Verdad, 19 Octubre 2008.
MURCIA / Los problemas se multiplican en la protectora Proaniplant por cumplir su máxima de 'sacrificio cero'.
«Algunas perreras se han convertido en un campo de exterminio», denuncian.
AGM «Nuestra máxima de sacrificio cero fue lo que nos llevó a esta situación. Y esto no se sabe. Si nosotros solo tenemos capacidad para trecientos cincuenta animales, pero había setecientos, era porque no queríamos matarlos. Otras perreras se han convertido en un campo de exterminio. Son las que antes nos traían los animales para no tener que matarlos». Así de tajantes se manifiestan David Mármol y Fernando Martínez, como presidente y secretario-recientemente elegidos- de la Sociedad Protectora de Animales Proaniplant, la que el pasado julio se vio envuelta en una serie de denuncias por maltrato a los animales.
Todo comenzó por el expediente de la Consejería de Agricultura, iniciado el 17 de julio, con motivo de la última denuncia. Las visitas de alternativos inspectores a las instalaciones acabaron con un acta en la que se reflejaban los problemas existentes, como que no se cumplían las normas del registro nucleo zoológico, que «para poder contar con él, como única condición exige licencia de apertura, que es de lo que no se disponía. Como la pescadilla que se muerde la cola.
Como no se dispone de licencia de apertura - que se solicitó ya en 1991 y sobre la que nunca se obtuvo respuesta- no se puede autorizar la instalación del núcleo zoológico». La concejalía de Urbanismo dictó una orden de cierre, que podría ser o no realidad,y, por otra parte, se anunció la congelación de la subvención municipal que anualmente Proaniplant venía recibiendo. También se comunicó la necesidad -sin especificar el número- de desalojar animales del centro.
Pese a todos los problemas surgidos, la nueva directiva comenzó sus funciones con enorme entusiasmo. Desde entonces, se ha logrado que se adopte a gran parte de los 706 perros y de los más de cien gatos existentes en las instalaciones de la sociedad. «Nuestra misión es -afirman David y Fernando- defender a los animales de Proaniplant. Gracias a nuestro empeño y, curiosamente, a través de parte de las sociedades que nos denunciaron, hemos logrado que se adopten perros en Alemania, Holanda, Suecia, Austria, Suiza... , algo que no cesa»
¿Por qué esta no menos curiosa situación? «Porque en Europa hay menos perros, no se abandonan como aquí y los ciudadanos se interesan más».
La Verdad, 19 Octubre 2008.
Una donación de 600.000 euros para pobres, misioneros y animales.
La nueva directiva de Proaniplant, ratificada el pasado 26 de septiembre, está dispuesta a iniciar un trabajo intenso. Su primera meta será aumentar en 200 el número de socios que disminuyó drásticamente -eran más de mil- en los últimos tiempos. Si, económicamente, la sociedad se había podido mantener se debió, sobre todo, a la donación, en torno a los 200.000 euros (solo quedan unos 25.000), realizada en su testamento por don Pablo Martínez-Prados García, fallecido en noviembre del 2.002, quien dejó a partes iguales todo su dinero a las Hermanitas de los Pobres, Instituto de Misiones Extranjeras y Proaniplant.
Desde primeros de septiembre, se ha conseguido captar setenta nuevos socios, con una cuota mínima de seis euros. «Hay quien se muestra muy insolidario y devuelve los recibos ante las nueva cuotas, que antes eran de apenas euro y medio. Pese a todo -afirma Fernando Martínez-vamos a conseguir esos doscientos socios, y luego iremos por otros doscientos».
Al margen de esto, gran parte de sus esperanzas se basa en las ayudas depositadas en la cuenta abierta en Cajamar, número 30580238142720002653, y en empresas, como Calgill, que les oferten la alimentación de los animales de modo gratuito.Y, más que nada, confían en disponer pronto de nuevas instalaciones, para las que se ha adquirido un solar de 4.875 metros cuadrados. Su costo y las subsiguientes obras costarán 190.000 euros.
La directiva baraja otros proyectos, como que sean lo estudiantes de Veterinaria los encargados de la asistencia sanitaria de los animales. También se pretende disponer de un hotel de perros, para que cualquiera que se ausente disponga de un local donde dejarlos, y nunca abandonarlos; contar con una furgoneta adecuada para trasladar a los animales a centros de la Tercera Eda... Pero «los animales comen y hay que cuidarlos. Para todo esto se necesita dinero». Y ¿por qué David . ingeniero técnico industrial, y Fernando, economista auditor. se meten en estos tinglados? «Solo porque somos amantes de los animales
MURCIA / Los problemas se multiplican en la protectora Proaniplant por cumplir su máxima de 'sacrificio cero'.
«Algunas perreras se han convertido en un campo de exterminio», denuncian.
AGM «Nuestra máxima de sacrificio cero fue lo que nos llevó a esta situación. Y esto no se sabe. Si nosotros solo tenemos capacidad para trecientos cincuenta animales, pero había setecientos, era porque no queríamos matarlos. Otras perreras se han convertido en un campo de exterminio. Son las que antes nos traían los animales para no tener que matarlos». Así de tajantes se manifiestan David Mármol y Fernando Martínez, como presidente y secretario-recientemente elegidos- de la Sociedad Protectora de Animales Proaniplant, la que el pasado julio se vio envuelta en una serie de denuncias por maltrato a los animales.
Todo comenzó por el expediente de la Consejería de Agricultura, iniciado el 17 de julio, con motivo de la última denuncia. Las visitas de alternativos inspectores a las instalaciones acabaron con un acta en la que se reflejaban los problemas existentes, como que no se cumplían las normas del registro nucleo zoológico, que «para poder contar con él, como única condición exige licencia de apertura, que es de lo que no se disponía. Como la pescadilla que se muerde la cola.
Como no se dispone de licencia de apertura - que se solicitó ya en 1991 y sobre la que nunca se obtuvo respuesta- no se puede autorizar la instalación del núcleo zoológico». La concejalía de Urbanismo dictó una orden de cierre, que podría ser o no realidad,y, por otra parte, se anunció la congelación de la subvención municipal que anualmente Proaniplant venía recibiendo. También se comunicó la necesidad -sin especificar el número- de desalojar animales del centro.
Pese a todos los problemas surgidos, la nueva directiva comenzó sus funciones con enorme entusiasmo. Desde entonces, se ha logrado que se adopte a gran parte de los 706 perros y de los más de cien gatos existentes en las instalaciones de la sociedad. «Nuestra misión es -afirman David y Fernando- defender a los animales de Proaniplant. Gracias a nuestro empeño y, curiosamente, a través de parte de las sociedades que nos denunciaron, hemos logrado que se adopten perros en Alemania, Holanda, Suecia, Austria, Suiza... , algo que no cesa»
¿Por qué esta no menos curiosa situación? «Porque en Europa hay menos perros, no se abandonan como aquí y los ciudadanos se interesan más».
La Verdad, 19 Octubre 2008.
Una donación de 600.000 euros para pobres, misioneros y animales.
La nueva directiva de Proaniplant, ratificada el pasado 26 de septiembre, está dispuesta a iniciar un trabajo intenso. Su primera meta será aumentar en 200 el número de socios que disminuyó drásticamente -eran más de mil- en los últimos tiempos. Si, económicamente, la sociedad se había podido mantener se debió, sobre todo, a la donación, en torno a los 200.000 euros (solo quedan unos 25.000), realizada en su testamento por don Pablo Martínez-Prados García, fallecido en noviembre del 2.002, quien dejó a partes iguales todo su dinero a las Hermanitas de los Pobres, Instituto de Misiones Extranjeras y Proaniplant.
Desde primeros de septiembre, se ha conseguido captar setenta nuevos socios, con una cuota mínima de seis euros. «Hay quien se muestra muy insolidario y devuelve los recibos ante las nueva cuotas, que antes eran de apenas euro y medio. Pese a todo -afirma Fernando Martínez-vamos a conseguir esos doscientos socios, y luego iremos por otros doscientos».
Al margen de esto, gran parte de sus esperanzas se basa en las ayudas depositadas en la cuenta abierta en Cajamar, número 30580238142720002653, y en empresas, como Calgill, que les oferten la alimentación de los animales de modo gratuito.Y, más que nada, confían en disponer pronto de nuevas instalaciones, para las que se ha adquirido un solar de 4.875 metros cuadrados. Su costo y las subsiguientes obras costarán 190.000 euros.
La directiva baraja otros proyectos, como que sean lo estudiantes de Veterinaria los encargados de la asistencia sanitaria de los animales. También se pretende disponer de un hotel de perros, para que cualquiera que se ausente disponga de un local donde dejarlos, y nunca abandonarlos; contar con una furgoneta adecuada para trasladar a los animales a centros de la Tercera Eda... Pero «los animales comen y hay que cuidarlos. Para todo esto se necesita dinero». Y ¿por qué David . ingeniero técnico industrial, y Fernando, economista auditor. se meten en estos tinglados? «Solo porque somos amantes de los animales